Explorador de esculturas

Francisco Olivella

Autor: Daniela Truzman
Foto: Pich Urdaneta

A primera vista, Francisco es un veinteañero como cualquier otro. Su celular es una extensión de su mano. Solo que, además de las selfies, su teléfono está lleno de fotos de esculturas que ha ido registrando por toda la ciudad. En el año 2016 inició un proyecto llamado Mundo Escultura con la intención de despertar interés ciudadano por estas obras que suelen pasar desapercibidas en la capital. Su próxima meta: realizar un mapa digital de los monumentos panameños.

¿Cuándo comenzó tu interés por los monumentos, el arte y la valoración del patrimonio?

Al comienzo de mi carrera universitaria en la Universidad de Panamá, me dí cuenta de que el campus estaba dotado de mucho contenido artístico, entre esos sus esculturas que resaltan mucho. Me puse a pensar que el estudiante universitario debe ser un ciudadano integral, que debe pensar no solamente en su ámbito académico sino en el medio ambiente, en lo artístico y otro tipo de cuestiones que le competen a la sociedad y noté que no había una conexión entre el ciudadano y su patrimonio, con las esculturas y los monumentos, así que pensé en cuál sería la manera más dinámica de promover este patrimonio con las nuevas generaciones. A partir de ahí empezamos a hacer un estudio, a manera de hobby, de todas las esculturas del campus, eso implicaba tomarles fotografías, conocer la historia del personaje, su legado y el aspecto técnico de la obra. Después nos dimos cuenta de que había que proyectarlos en algún espacio y decidimos llevarlos a las redes sociales como la mejor manera de promoverlo porque, ahí es donde están la mayoría de las personas, en la multipantalla.

¿Qué tipo de iniciativas han realizado?

En Mundo Escultura tenemos como objetivo revalorizar el patrimonio escultórico y monumental y conectarlo con las personas. A partir de esa propuesta valor, pensamos que no solamente debe promocionarse a través de las redes sociales sino también en espacios físicos en donde se hable con las personas. Al principio, participábamos en espacios organizados por otros. Fuimos parte del programa “Cultura Naranja PTY 2016”, organizado por Open Arts, y después se nos abrió las puertas para dar la charla “Experto Visitante” en el Biomuseo, en donde expusimos el tema “Mapeando las esculturas de Panamá”. La primera actividad que realizamos por nuestra cuenta fue la exposición Panamá Monumental 2018 en abril de 2018, que es el mes de los monumentos.

¿Cómo se puede fomentar el respeto hacia el patrimonio?

Un factor importante para las nuevas generaciones es vincular el patrimonio con la tecnología. Las esculturas y los monumentos se hicieron con el sentido de hacer didáctico el espacio público o para mostrar el legado de alguien. Lo que hay que hacer es darlo a conocer.

¿Qué escultura habría que crear para empezar a contar la historia de los próximos 500 años?

Hemos notado que algunos ámbitos se han visto mucho más representados en las esculturas y monumentos que otros. Habría que hacer alusión a más figuras femeninas, hay muchas mujeres en nuestra historia que han hecho cosas muy significativas y creo que se debe equiparar el nivel de representación que tienen.

¿Cómo es la Panamá que sueñas?

Me imagino una ciudad mucho más amigable en el ámbito cultural y el medioambiental. Creo que Panamá es un país que tiene una rica historia que muchas veces no es valorada por los mismos panameños. Pero las cosas que queremos para la ciudad no solamente tienen que ser pensadas por el Estado, sino también por los ciudadanos particulares y por las organizaciones privadas. Creo que trabajando en conjunto podemos lograr que Panamá sea un país completo e integral.