La obra que transformó el transporte en la ciudad

Roberto Roy

Autor: Daniel Molina
Foto: Luis Cantillo

El Metro de Panamá es una megaobra de transporte público que nos revela una ciudad con una movilidad pensada a futuro. Con la construcción de las Líneas 1 y 2 se contrataron más de 10 mil personas, y se crearon otros 700 nuevos puestos de trabajo. Un promedio de 344 mil 321 usuarios utiliza la Línea 1 en días laborables, mientras que 148 mil 758 se transportan en la Línea 2. El máximo responsable de esta institución, Roberto Roy, explica cómo este sistema está dando un giro a Panamá.

¿Cómo el Metro de Panamá ha transformado la movilidad del ciudadano?

La Línea 1 del Metro le ha reducido a muchos capitalinos el tiempo que invierten en sus viajes, incluyendo el de espera. El efecto es particularmente notorio en el caso de los usuarios que viven y trabajan cerca del Metro, pues el trayecto en el eje de la Línea 1 demora en el Metro menos de la mitad del tiempo que en otros modos de transporte. El impacto en la reducción total del tiempo de viaje es aún más notorio desde que entró en funcionamiento la Línea 2.

¿Qué desafíos tiene el Metro?

El desafío más importante es mantener y mejorar la calidad del servicio y por ende la satisfacción al usuario, así: adquisición periódica de nueva flota; mantener el ritmo de construcción de nuevas líneas para consolidar la red maestra; transferencia tecnológica de extranjeros a panameños; tarifa razonable que pague los gastos de funcionamiento y mantenimiento, mediante una política de captación de ingresos incluyendo una ley general de financiamiento del transporte público; y continuar la política de educación y limpieza, mediante el programa de MetroCultura.

¿Pueden la Línea 1 y 2 del Metro transformar la configuración de la capital?

¡Esto ya está ocurriendo! La propia construcción del Metro ha permitido el mejoramiento y creación de espacios públicos en los entornos de muchas estaciones, tarea que ha sido continuada por la Alcaldía de Panamá y que sin duda seguirá formando parte de ahora en adelante de los planes y proyectos de las distintas administraciones locales. El otro aspecto importante tiene que ver con los cambios de uso del suelo y densidad poblacional en los corredores del Metro. Cada vez será mayor la cantidad de gente que vive y trabaja en el área de influencia directa del sistema (franja de 500 metros a cada lado de la Línea). Los promotores inmobiliarios lo saben también, por lo que “espontáneamente” se genera un proceso de relocalización de personas e inversiones. La reglamentación debe ir por delante. Hemos ya coordinado la realización de los Diagnósticos Urbanísticos de las áreas de influencia de las Líneas 1, 2 y 3.

¿Cómo es la ciudad de Panamá con la que usted sueña?

Una ciudad con un aprovechamiento más racional del espacio urbano. Que use el potencial efecto ordenador de un sistema como el Metro para combatir la dispersión geográfica. Es muy caro mantener una ciudad tan dispersa. Quiero pensar que nos quedamos con el área que ya ocupa la urbe hoy y que creceremos hacia adentro, densificando, y reforzando las otras redes de servicios. Requerimos aceras amplias y arboladas, nuevos parques. Ríos recuperados y sin basura. Un sistema semafórico coordinado, que incluya semáforos peatonales, para poder minimizar los pasos peatonales a desnivel, antiestéticos e inutilizables por las personas con dificultades motoras. El Metro sería la columna vertebral, complementado y alimentado por el Metro Bus y por otros operadores que surgirán del mejoramiento y modernización de los operadores tradicionales.