Soberana del camino

Reyna Oscamayta

Autor: Daniela Truzman
Foto: Pich Urdaneta

Estar tras el volante se le hace casi instintivo, nacida en una familia dedicada al transporte, aprendió a conducir a los 14 años de edad y comenzó a manejar camiones a los 17. Desde 2013 trabaja como operadora de MiBus, empresa encargada de la operación del sistema de Metro Bus de la capital istmeña. Allí ha recorrido la mayoría de las rutas: Corredor Norte, Corredor Sur, las troncales: Vía España, Tumba Muerto, Transístmica y Mañanitas, actualmente pertenece al patio de La Doña que cubre la parte Sur de la ciudad. A sus 37 años de edad, Reyna es ama y señora de las calles de Panamá.

¿Cuál es tu lugar favorito de la ciudad?

Clayton, porque las casas no tienen cerca. Todo es natural, uno se relaja haciendo esa ruta.

¿Tu trabajo cambió la forma en la que percibes la capital?

Bastante. Antes sentía que en la ciudad todo era lejos. Pero en el momento en el que te sientas frente al volante, te das cuenta de que todo está cerquita. Ahora conozco lugares que eran desconocidos para mí, por ejemplo la ruta del Norte, aunque la hice muy poco, siento que para allá es otro mundo, me ha gustado bastante, me gusta mi trabajo.

Desde el volante, ¿cómo evalúas a la ciudad y a los ciudadanos de Panamá?

La ciudad está hermosa. Panamá ha cambiado mucho, la veo bastante moderna con el Metro, las calles son más amplias. Cuando yo entré a trabajar en MiBus, hace seis años, las personas siempre estaban a la defensiva, por lo menos con nosotros. Era un estrés único, ahora te saludan cuando suben a la unidad. Eso cambió muchísimo, como en 90 %.

¿Qué te gusta de ser operadora de Metro Bus?

Que siempre es diferente. Me encanta estar en contacto con las personas y me gusta ser libre. Manejando bus no tienes un jefe inmediato, tu jefe eres tú. Solamente haces tu ruta, y nunca es igual: vas para allá, vienes para Calidonia, vas a Mañanitas, después te toca Tocumen, mi trabajo no es monótono.

¿Son ocho horas diarias de manejo?

A veces menos, a veces más.

Con ese promedio, creo que eres la persona indicada para preguntarle, ¿cómo podemos disminuir las horas que pasamos en el tranque?

Los panameños tenemos que caminar más. Dejar esa cultura de que tenemos que ir a la tienda de al lado en carro. Hay que poner de nuestra parte y caminar un poquito más. El tranque se hace porque hay demasiados carros en vía. Creo que también se deben hacer más aceras, para que la gente se motive.

¿Qué tan retador es ser mujer y tener un trabajo como el tuyo en una ciudad como esta?

Es un poquito difícil, porque tiene que haber un balance entre el hogar y el trabajo. Nuestro el trabajo puede ser estresante, es difícil en el área emocional, a veces tienes problemas en la casa y tienes que dejarlos ahí. Cuando vengo para el trabajo siempre me ven contenta, porque trato de no estresarme. Así que cuando llego todo es chévere, empiezo mi ruta, primero Dios, que nos lleve y nos traiga con bien. Pero es bastante difícil, emocionalmente, lograr un equilibrio de lo que tienes que hacer, de lo que tienes que llevar en tu vida. No puedes mezclar las cosas.

¿Es importante para tu trabajo ser servicial?

La clave siendo operador o lo que sea que vayas a ser, es ser servicial. En el bus se suben diferentes tipos de gente, hay personas buenas, hay personas malas, hay de todo. A veces cuando vienen bravos, les dices “buenos días” o les tiras una sonrisa y les cambia la actitud.

¿Cómo es la Panamá que sueñas?

La sueño con más áreas verdes, más parques para los niños y menos carros. El transporte en Panamá hoy en día es bueno, no hay necesidad de estar comprando tanto carro ¿Para qué? Si tenemos hasta la aplicación para tomar los buses. La ciudad sería aún más hermosa sin tantos carros, con más árboles, pienso yo que eso sería bueno.